En una operación llevada a cabo por la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), se logró la detención de Martín González, un joven de 20 años señalado como uno de los sospechosos en el doble homicidio del empresario Rodrigo González y la profesora María Carolina Callejas, ocurrido en su parcela en la comuna de Graneros. Esta detención se realizó en la región de O’Higgins durante la mañana del jueves. Este arresto se suma a otros cuatro individuos que ya han sido recluidos en relación con este caso. Kevin Arenas (21), Diego Fuentes (20), Gonzalo Quiroz (22) y Luis Saavedra (27) son parte del grupo de delincuentes vinculados al doble homicidio. Según lo informado por lun.com, los primeros tres están acusados como autores materiales del crimen, mientras que Saavedra es buscado por el Ministerio Público por su presunta participación en el traslado de los sospechosos la noche del asesinato. El subprefecto Juan Reyes, jefe de la Brigada de Homicidios de Rancagua, explicó que la detención de Martín González no fue casualidad: Con Martín hicimos un trabajo bien especial en conjunto con la Brigada de Robos. Este sujeto aparte del doble homicidio participó en varios robos posteriores. Además, se reveló que González era amigo de los otros sospechosos y colaboraba en la selección de lugares para cometer delitos, según la confesión de Kevin Arenas. Reyes también mencionó que están analizando imágenes capturadas por un dron para demostrar que los criminales realizaban estudios previos antes de cometer robos. Aunque González portaba un arma y disparó durante el incidente, no se le considera como el autor directo del doble homicidio. El subprefecto destacó que el vínculo entre González y los demás implicados tiene origen en el Sename, y lo describió como un individuo peligroso dedicado a actividades ilícitas como robos y amenazas. Es la forma que tienen de ganarse el respeto entre sus pares. Su supervivencia ha sido imponiéndose con violencia, agregó. Finalmente, se señaló que el doble homicidio fue un punto crítico para los criminales, ya que a partir de ese momento comenzaron a cometer errores que facilitaron su captura. Fuente: Publimetro
El caso del asesinato del farmacéutico Francisco Albornoz sigue sin resolverse, a pesar de que los dos sospechosos se encuentran en prisión preventiva. Detalles de las declaraciones y la secuencia de eventos que llevaron al cuerpo del joven de 21 años a Placilla están saliendo a la luz. Cuando los dos imputados, el chef José Baeza y el médico ecuatoriano Christian González, viajaban hacia el sur, hicieron una parada en un servicentro donde adquirieron varios productos, incluyendo papas fritas. La declaración de González, revelada parcialmente en el matinal ‘Contigo en la Mañana’, ha sido fundamental para la investigación en curso. En su testimonio, González sugiere que el plan delictivo fue ideado por Baeza. Según González, todo comenzó cuando Baeza le informó que Albornoz había convulsionado. “Kai (José Miguel Baeza) me dice que Francisco había convulsionado. Lo vi convulsionar un poco, en la cama”, explicó González. A pesar de sugerir llamar a una ambulancia, Baeza propuso ocultar el crimen. “Kai me dice que había que ocultar el cuerpo. Me dijo si yo tenía una silla de ruedas o algo para trasladar el cuerpo de Francisco. Llegó a mi habitación con un cobertor azul oscuro (…) junto a Kai envolvimos el cuerpo con el cobertor”, narró González. Después de esconder el cuerpo, ambos continuaron hacia el sur y se detuvieron en un servicentro. “Sólo me bajé yo a comprar y Kai permaneció en el auto. Compré dos bebidas Coca Cola, unas papas fritas de esas que vienen en un envase tipo tubo. Esa compra la pagué en efectivo y me costó algo así como 5 mil pesos”, relató González. González también mencionó que Baeza le pidió un objeto sin especificar su uso. “Recuerdo que me estacioné donde están los surtidores de combustible y en ese momento Kai me dijo que necesitaba un roca. No me dijo para qué era la roca, pero yo supuse que era para romper el celular de Francisco”, comentó. Finalmente, González describió cómo Baeza quemó el celular de Albornoz como parte desesperada por encubrir el crimen. “Me subí a mi auto y manejé por la carretera hacia el sur. Kai encendió el tubo de las papas fritas. Me estacioné cerca de una caseta de SOS de color azul y Kai quemó el tubo y dentro de dicho tubo estaba el celular de Francisco. Esto fue a la orilla de carretera, de la Ruta 5 Sur. Kai se bajó del auto para quemar el teléfono. Yo me quedé al interior del auto”, detalló González. Fuente: Publimetro
Un revelador testimonio respecto de la personalidad de José Miguel Baeza, uno de los dos imputados por la muerte del técnico farmacéutico Francisco Albornoz, entregó esta mañana un joven que en los últimos seis años mantuvo encuentros íntimos con el chef chileno. PUBLICIDAD Fue en el programa “Contigo en la mañana”, de Chilevisión, donde el cercano a Baeza recordó la forma en que conoció al detenido por la PDI, y la insistencia del chef para introducirlo en el consumo de drogas. “A él lo conocí alrededor de los 18 y 19 años, actualmente han pasado seis años, ya que tengo 25. En ese tiempo él ya era bastante mayor. Alrededor de los 38 o 37 años habrá tenido”, indicó Luis, nombre de ficción con el que se le identificó en el matinal del canal privado. “La cosa es que con este sujeto yo empiezo a hablar netamente, de vez en cuando, esporádicamente, nunca tuve una relación más allá, así como de ‘oye, cómo está tu familia’, porque siempre fue en un contexto sexual. Lo conocí bajo esas dinámicas, bajo esos tipos de chats, bajo ese tipo de lenguaje, y más allá de eso, yo no conozco más”, agregó el joven, quien explicó que dichos contactos se dieron de forma esporádica durante el primer periodo de encuentros entre ambos. “Estas conversaciones se hacían cada, no sé, yo hablaba con él un rato, una noche, y ya al otro día yo no hablaba más. Podían pasar dos semanas y cuando me bajaban las ganas hablaba con él”, dijo. “Hubo como dos periodos, por así decirlo. Cuando yo era más joven, nunca concreté nada con él, pero siempre me insistía en juntarnos o vernos, hagamos algo, no sé qué. Y en ese entonces no me involucraba a nadie más. Éramos nosotros solamente”, explicó. “Luego, perdí el contacto con él. Pasó el tiempo y yo empecé a vivir en Santiago hace como dos o tres años. Y ahí retomé el contacto con él por redes sociales. Volvemos a hablar y retomamos la misma dinámica que veníamos teniendo. Pero como ya estaba más grande, tenía mi departamento, tenía donde juntarme con él, porque yo nunca accedí a juntarme con él en algún lugar que no fuera seguro, ahora sí sentía la seguridad de hacerlo, ya que también él trabajaba cerca de donde yo vivía y eso hacía más fácil nuestros encuentros (íntimos)”, puntualizó. PUBLICIDAD En su testimonio, el cercano de Baeza recordó que “él insistía hasta que un día le di el acceso (a encuentros sexuales), y en esa primera instancia no consumimos nada (de droga). Fue algo muy exprés, unos quince minutos. Se hizo lo que se tenía que hacer y chao pescao”, prosiguió con su relato el joven. “Yo siempre como que he tenido esa relación con él, como que no me interesa saber su nombre y de su vida. Y yo creo que esto es algo común que pasa dentro de la comunidad (homosexual), y también está normalizado y hay que cuestionárselo igual con este tipo de actos que ocurren”, reflexionó. “Me junté con él unas cuatro o cinco veces, creo, y todo estos en un periodo que pasaba un mes, dos meses, tres meses, una semana, dos semanas, porque no me acuerdo bien el tiempo cuando se hizo, pero fue más o menos así”, explicó. “En esos periodos conversaba con él y fue donde más le pude sacar el rollo en la forma en que él se expresaba. Yo conversaba mucho más con él por chat porque al momento de concretar sólo había acción. Y siempre estaba en la dinámica de ‘cómo está mi chiquito’, muy en diminutivo, siempre como tratando de expresar la diferencia de edad, que yo era más pequeño. Y siempre hacía ver esa diferencia de edad de entre 16 a 20 años que teníamos, de pendejito rico y cosas así”, aseveró. “Ya en el segundo periodo en que nos vimos me hablaba de drogas, y como que te incitaba a consumirlas porque siempre estaba metiéndote el bicho de las drogas”, concluyó. Fuente: Publimetro
En una noticia de última hora, se ha confirmado la detención de un segundo sospechoso en el caso del técnico farmacéutico Francisco Albornoz, cuyo cuerpo fue encontrado en un estero cercano al río Tinguiririca en San Fernando. El joven había desaparecido el pasado 23 de mayo en la comuna de Ñuñoa. El detenido ha sido identificado como José Miguel Baeza Cortés, un chef de más de cuarenta años, quien fue arrestado por la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) en su residencia en Codegua. Las autoridades no han proporcionado detalles adicionales sobre Baeza Cortés, pero se ha informado que se encontraron varios elementos en una estufa dentro de su casa, los cuales serán sometidos a peritaje. La Fiscalía Metropolitana Oriente ha confirmado la detención del segundo sospechoso por orden del 8° Juzgado de Garantía de Santiago. El detenido comparecerá ante el tribunal para la audiencia de control de detención. El chef chileno se une a Christian Alexander González Morales, el primer detenido en relación con la muerte del técnico farmacéutico. González Morales, un médico ecuatoriano de 31 años, proporcionó información inicial sobre el lugar donde se encontró sin vida el joven. Según reportes de CHV Noticias, González Morales llegó al país después de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM) como Médico Cirujano, lo que le habilita para ejercer en Chile. En los últimos años, trabajó en la Municipalidad de Cerro Navia y en la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Ñuñoa antes de ser desvinculado este año. Fuente: Publimetro
La muerte de Francisco Albornoz, un joven farmacéutico, ha sido confirmada este miércoles luego de que su cuerpo fuera encontrado en Placilla, región de O’Higgins. Según las primeras investigaciones, Albornoz habría fallecido en una junta en Ñuñoa antes de ser trasladado al lugar donde fue descubierto. El joven químico farmacéutico de 21 años había desaparecido desde que salió de su casa para asistir a una fiesta el pasado 23 de mayo, siendo buscado por sus seres queridos desde entonces. Amigos de Francisco han sugerido que la responsabilidad de su muerte podría recaer en otros individuos presentes en la reunión, lo que llevó a la detención de uno de ellos tras declarar ante la Fiscalía de Ñuñoa con la fiscal Rossana Folli. La Brigada de Ubicación de Personas (BRIUP) de la Policía de Investigaciones (PDI) se trasladó hasta la región de O’Higgins para encontrar el cadáver del joven Albornoz. De acuerdo a los informes, se cree que la muerte ocurrió en un departamento en Ñuñoa, donde los presentes reaccionaron con nerviosismo tras el incidente y decidieron trasladar el cuerpo en un automóvil hasta una quebrada en Placilla. El Servicio Médico Legal (SML) está llevando a cabo la autopsia del cuerpo para determinar la causa exacta del fallecimiento, luego de confirmar su identidad mediante análisis de huellas dactilares. Fuente: Publimetro
En una operación llevada a cabo por la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), se logró la detención de Martín González, un joven de 20 años señalado como uno de los sospechosos en el doble homicidio del empresario Rodrigo González y la profesora María Carolina Callejas, ocurrido en su parcela en la comuna de Graneros. Esta detención se realizó en la región de O’Higgins durante la mañana del jueves. Este arresto se suma a otros cuatro individuos que ya han sido recluidos en relación con este caso. Kevin Arenas (21), Diego Fuentes (20), Gonzalo Quiroz (22) y Luis Saavedra (27) son parte del grupo de delincuentes vinculados al doble homicidio. Según lo informado por lun.com, los primeros tres están acusados como autores materiales del crimen, mientras que Saavedra es buscado por el Ministerio Público por su presunta participación en el traslado de los sospechosos la noche del asesinato. El subprefecto Juan Reyes, jefe de la Brigada de Homicidios de Rancagua, explicó que la detención de Martín González no fue casualidad: Con Martín hicimos un trabajo bien especial en conjunto con la Brigada de Robos. Este sujeto aparte del doble homicidio participó en varios robos posteriores. Además, se reveló que González era amigo de los otros sospechosos y colaboraba en la selección de lugares para cometer delitos, según la confesión de Kevin Arenas. Reyes también mencionó que están analizando imágenes capturadas por un dron para demostrar que los criminales realizaban estudios previos antes de cometer robos. Aunque González portaba un arma y disparó durante el incidente, no se le considera como el autor directo del doble homicidio. El subprefecto destacó que el vínculo entre González y los demás implicados tiene origen en el Sename, y lo describió como un individuo peligroso dedicado a actividades ilícitas como robos y amenazas. Es la forma que tienen de ganarse el respeto entre sus pares. Su supervivencia ha sido imponiéndose con violencia, agregó. Finalmente, se señaló que el doble homicidio fue un punto crítico para los criminales, ya que a partir de ese momento comenzaron a cometer errores que facilitaron su captura. Fuente: Publimetro
El caso del asesinato del farmacéutico Francisco Albornoz sigue sin resolverse, a pesar de que los dos sospechosos se encuentran en prisión preventiva. Detalles de las declaraciones y la secuencia de eventos que llevaron al cuerpo del joven de 21 años a Placilla están saliendo a la luz. Cuando los dos imputados, el chef José Baeza y el médico ecuatoriano Christian González, viajaban hacia el sur, hicieron una parada en un servicentro donde adquirieron varios productos, incluyendo papas fritas. La declaración de González, revelada parcialmente en el matinal ‘Contigo en la Mañana’, ha sido fundamental para la investigación en curso. En su testimonio, González sugiere que el plan delictivo fue ideado por Baeza. Según González, todo comenzó cuando Baeza le informó que Albornoz había convulsionado. “Kai (José Miguel Baeza) me dice que Francisco había convulsionado. Lo vi convulsionar un poco, en la cama”, explicó González. A pesar de sugerir llamar a una ambulancia, Baeza propuso ocultar el crimen. “Kai me dice que había que ocultar el cuerpo. Me dijo si yo tenía una silla de ruedas o algo para trasladar el cuerpo de Francisco. Llegó a mi habitación con un cobertor azul oscuro (…) junto a Kai envolvimos el cuerpo con el cobertor”, narró González. Después de esconder el cuerpo, ambos continuaron hacia el sur y se detuvieron en un servicentro. “Sólo me bajé yo a comprar y Kai permaneció en el auto. Compré dos bebidas Coca Cola, unas papas fritas de esas que vienen en un envase tipo tubo. Esa compra la pagué en efectivo y me costó algo así como 5 mil pesos”, relató González. González también mencionó que Baeza le pidió un objeto sin especificar su uso. “Recuerdo que me estacioné donde están los surtidores de combustible y en ese momento Kai me dijo que necesitaba un roca. No me dijo para qué era la roca, pero yo supuse que era para romper el celular de Francisco”, comentó. Finalmente, González describió cómo Baeza quemó el celular de Albornoz como parte desesperada por encubrir el crimen. “Me subí a mi auto y manejé por la carretera hacia el sur. Kai encendió el tubo de las papas fritas. Me estacioné cerca de una caseta de SOS de color azul y Kai quemó el tubo y dentro de dicho tubo estaba el celular de Francisco. Esto fue a la orilla de carretera, de la Ruta 5 Sur. Kai se bajó del auto para quemar el teléfono. Yo me quedé al interior del auto”, detalló González. Fuente: Publimetro
Un revelador testimonio respecto de la personalidad de José Miguel Baeza, uno de los dos imputados por la muerte del técnico farmacéutico Francisco Albornoz, entregó esta mañana un joven que en los últimos seis años mantuvo encuentros íntimos con el chef chileno. PUBLICIDAD Fue en el programa “Contigo en la mañana”, de Chilevisión, donde el cercano a Baeza recordó la forma en que conoció al detenido por la PDI, y la insistencia del chef para introducirlo en el consumo de drogas. “A él lo conocí alrededor de los 18 y 19 años, actualmente han pasado seis años, ya que tengo 25. En ese tiempo él ya era bastante mayor. Alrededor de los 38 o 37 años habrá tenido”, indicó Luis, nombre de ficción con el que se le identificó en el matinal del canal privado. “La cosa es que con este sujeto yo empiezo a hablar netamente, de vez en cuando, esporádicamente, nunca tuve una relación más allá, así como de ‘oye, cómo está tu familia’, porque siempre fue en un contexto sexual. Lo conocí bajo esas dinámicas, bajo esos tipos de chats, bajo ese tipo de lenguaje, y más allá de eso, yo no conozco más”, agregó el joven, quien explicó que dichos contactos se dieron de forma esporádica durante el primer periodo de encuentros entre ambos. “Estas conversaciones se hacían cada, no sé, yo hablaba con él un rato, una noche, y ya al otro día yo no hablaba más. Podían pasar dos semanas y cuando me bajaban las ganas hablaba con él”, dijo. “Hubo como dos periodos, por así decirlo. Cuando yo era más joven, nunca concreté nada con él, pero siempre me insistía en juntarnos o vernos, hagamos algo, no sé qué. Y en ese entonces no me involucraba a nadie más. Éramos nosotros solamente”, explicó. “Luego, perdí el contacto con él. Pasó el tiempo y yo empecé a vivir en Santiago hace como dos o tres años. Y ahí retomé el contacto con él por redes sociales. Volvemos a hablar y retomamos la misma dinámica que veníamos teniendo. Pero como ya estaba más grande, tenía mi departamento, tenía donde juntarme con él, porque yo nunca accedí a juntarme con él en algún lugar que no fuera seguro, ahora sí sentía la seguridad de hacerlo, ya que también él trabajaba cerca de donde yo vivía y eso hacía más fácil nuestros encuentros (íntimos)”, puntualizó. PUBLICIDAD En su testimonio, el cercano de Baeza recordó que “él insistía hasta que un día le di el acceso (a encuentros sexuales), y en esa primera instancia no consumimos nada (de droga). Fue algo muy exprés, unos quince minutos. Se hizo lo que se tenía que hacer y chao pescao”, prosiguió con su relato el joven. “Yo siempre como que he tenido esa relación con él, como que no me interesa saber su nombre y de su vida. Y yo creo que esto es algo común que pasa dentro de la comunidad (homosexual), y también está normalizado y hay que cuestionárselo igual con este tipo de actos que ocurren”, reflexionó. “Me junté con él unas cuatro o cinco veces, creo, y todo estos en un periodo que pasaba un mes, dos meses, tres meses, una semana, dos semanas, porque no me acuerdo bien el tiempo cuando se hizo, pero fue más o menos así”, explicó. “En esos periodos conversaba con él y fue donde más le pude sacar el rollo en la forma en que él se expresaba. Yo conversaba mucho más con él por chat porque al momento de concretar sólo había acción. Y siempre estaba en la dinámica de ‘cómo está mi chiquito’, muy en diminutivo, siempre como tratando de expresar la diferencia de edad, que yo era más pequeño. Y siempre hacía ver esa diferencia de edad de entre 16 a 20 años que teníamos, de pendejito rico y cosas así”, aseveró. “Ya en el segundo periodo en que nos vimos me hablaba de drogas, y como que te incitaba a consumirlas porque siempre estaba metiéndote el bicho de las drogas”, concluyó. Fuente: Publimetro
En una noticia de última hora, se ha confirmado la detención de un segundo sospechoso en el caso del técnico farmacéutico Francisco Albornoz, cuyo cuerpo fue encontrado en un estero cercano al río Tinguiririca en San Fernando. El joven había desaparecido el pasado 23 de mayo en la comuna de Ñuñoa. El detenido ha sido identificado como José Miguel Baeza Cortés, un chef de más de cuarenta años, quien fue arrestado por la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) en su residencia en Codegua. Las autoridades no han proporcionado detalles adicionales sobre Baeza Cortés, pero se ha informado que se encontraron varios elementos en una estufa dentro de su casa, los cuales serán sometidos a peritaje. La Fiscalía Metropolitana Oriente ha confirmado la detención del segundo sospechoso por orden del 8° Juzgado de Garantía de Santiago. El detenido comparecerá ante el tribunal para la audiencia de control de detención. El chef chileno se une a Christian Alexander González Morales, el primer detenido en relación con la muerte del técnico farmacéutico. González Morales, un médico ecuatoriano de 31 años, proporcionó información inicial sobre el lugar donde se encontró sin vida el joven. Según reportes de CHV Noticias, González Morales llegó al país después de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM) como Médico Cirujano, lo que le habilita para ejercer en Chile. En los últimos años, trabajó en la Municipalidad de Cerro Navia y en la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Ñuñoa antes de ser desvinculado este año. Fuente: Publimetro
La muerte de Francisco Albornoz, un joven farmacéutico, ha sido confirmada este miércoles luego de que su cuerpo fuera encontrado en Placilla, región de O’Higgins. Según las primeras investigaciones, Albornoz habría fallecido en una junta en Ñuñoa antes de ser trasladado al lugar donde fue descubierto. El joven químico farmacéutico de 21 años había desaparecido desde que salió de su casa para asistir a una fiesta el pasado 23 de mayo, siendo buscado por sus seres queridos desde entonces. Amigos de Francisco han sugerido que la responsabilidad de su muerte podría recaer en otros individuos presentes en la reunión, lo que llevó a la detención de uno de ellos tras declarar ante la Fiscalía de Ñuñoa con la fiscal Rossana Folli. La Brigada de Ubicación de Personas (BRIUP) de la Policía de Investigaciones (PDI) se trasladó hasta la región de O’Higgins para encontrar el cadáver del joven Albornoz. De acuerdo a los informes, se cree que la muerte ocurrió en un departamento en Ñuñoa, donde los presentes reaccionaron con nerviosismo tras el incidente y decidieron trasladar el cuerpo en un automóvil hasta una quebrada en Placilla. El Servicio Médico Legal (SML) está llevando a cabo la autopsia del cuerpo para determinar la causa exacta del fallecimiento, luego de confirmar su identidad mediante análisis de huellas dactilares. Fuente: Publimetro