La región de Magallanes se ve nuevamente sacudida por un escándalo que involucra a funcionarios de Gendarmería. En esta ocasión, cuatro empleados de la cárcel de Punta Arenas han sido denunciados por presuntas prácticas indebidas, como el abuso de poder para vender completos a los internos a un precio inflado de $3.500, dos mil pesos más caros que al público en general. El diputado Roberto Arroyo, representante del Biobío y miembro de la Comisión de Defensa, ha calificado este suceso como grave. Según sus palabras, estas prácticas no solo reflejan abuso de poder desde una posición privilegiada, sino también un aprovechamiento económico inaceptable que erosiona la confianza en la institución. Este incidente se suma a la preocupante cifra de ocho funcionarios de Gendarmería despedidos en lo que va del año por irregularidades administrativas. Arroyo ha expresado su inquietud al respecto: Aquí hay un problema de fondo. Estamos viendo una serie de hechos que evidencian falta de control interno, falta de liderazgo y ausencia de una estrategia clara para enfrentar estas conductas dentro de Gendarmería. Ante esta situación, el diputado Arroyo ha anunciado que solicitará una audiencia con la Dirección Nacional de Gendarmería y ha enviado un oficio al Ministerio de Justicia para obtener información sobre las causas identificadas y las acciones tomadas para abordar estos problemas. Además, se está evaluando la posibilidad de presentar un proyecto de ley destinado a fortalecer y modernizar a Gendarmería, proporcionándole herramientas adicionales, controles más estrictos y estándares más elevados para combatir el crimen organizado y prevenir la repetición de estos incidentes. En última instancia, Arroyo ha enfatizado la importancia de proteger la institucionalidad penitenciaria y garantizar que los reclusos cumplan sus condenas en un entorno libre de abusos o beneficios indebidos. El Estado debe dar ejemplo y mantener una política de tolerancia cero ante estos actos, concluyó el legislador. Fuente: Publimetro
En una audiencia judicial que tuvo lugar recientemente, se decretó la prisión preventiva de Martín de los Santos Lehmann , acusado de agredir brutalmente a un conserje en Vitacura. La jueza del 4° Juzgado de Garantía de Santiago accedió a la solicitud de la parte querellante y revocó la medida cautelar de firma mensual que hasta ahora mantenía el imputado. PUBLICIDAD Fue a mediados de mayo que De los Santos, de 34 años, atacó violentamente a Guillermo Oyarzún, trabajador de 70 años, causándole lesiones tan graves que perdió la visión de un ojo. La brutal golpiza generó conmoción pública y fue ampliamente difundida por redes sociales. En el transcurso de la audiencia realizada por Zoom, el acusado apareció tomando mate, vapeando y haciendo gestos a la cámara, lo que ya había generado críticas. Sin embargo, el momento más tenso ocurrió cuando la jueza comunicaba su decisión de enviarlo a la cárcel: el imputado interrumpió abruptamente y lanzó una serie de comentarios que sorprendieron a los presentes. “¡Oiga magistrado, usted está haciendo un show mediático! ¡Todo lo que ha dicho es falso, esto es completamente ilegal, no es un Estado de derecho!”, reclamó con evidente molestia. Luego añadió: “Le pido que tome una decisión según el código penal (...) Parece una audiencia que está manipulada por los medios de comunicación”, según consignó el video recogido por T13. Su intervención continuó con declaraciones que apuntaban a justificar su comportamiento: “Yo, como ciudadano libre, no condenado... Le duela a quien le duela, yo doy empleo, doy trabajo, soy una persona trabajadora, no ando eligiendo viejitos por la calle... si me tomo esta licencia es porque tengo mi derecho a defenderme“. Pero el alegato del imputado no quedó allí. Enseguida continuó con sus declaraciones y advertencias: “¡Va a haber un estallido social si esto no se soluciona como corresponde! ¡Le pido por favor que dé nuevamente su veredicto! (...) ¡No puede ser que las redes sociales sean más juez de garantía que usted! ¡¿Me entiende o no?! ¡Póngase en la posición de que yo sea su hijo!“. Pese a su arremetida, el tribunal ratificó la medida cautelar y ordenó el ingreso inmediato de De los Santos a prisión preventiva. Fuente: Publimetro
Un suboficial de Gendarmería fue detenido este lunes tras ser sorprendido intentando ingresar objetos prohibidos al Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) Colina I, en el marco de una operación conjunta entre la Fiscalía Metropolitana Occidente y el Departamento de Investigación Criminal de Gendarmería. El hecho ocurrió a las 7:45 horas, momento en que el funcionario se aprestaba a comenzar su turno. Según detalló la institución, el hombre portaba en su mochila 24 teléfonos celulares, 12,9 gramos de clorhidrato de cocaína, 40 gramos de cannabis, diversos medicamentos, $1.900.000 en efectivo y otros elementos aún bajo peritaje. Al ser abordado por sus colegas, el suboficial intentó huir en su vehículo particular. No obstante, al verse acorralado, abandonó el auto e intentó escapar a pie, incluso saltando el cerco perimetral del recinto. Su fuga fue frustrada por efectivos del equipo de Investigación Criminal de Gendarmería, quienes lograron detenerlo tras una breve persecución. La audiencia de control de detención se realizará este martes a las 11:00 horas en el Juzgado de Garantía de San Bernardo. El imputado será formalizado por tráfico de drogas en pequeñas cantidades y por el ingreso ilegal de dispositivos tecnológicos a un recinto penitenciario. Desde Gendarmería aseguraron que se aplicarán todas las sanciones administrativas correspondientes y enfatizaron su postura institucional frente a este tipo de hechos. “Reiteramos el compromiso institucional con erradicar cualquier forma de corrupción o ilícito dentro del sistema penitenciario ”, señalaron desde la entidad, según consignó ADN Chile. La investigación continúa con el objetivo de determinar si el funcionario actuaba solo o formaba parte de una red más amplia dedicada al ingreso a artículos ilícitos al penal. Fuente: Publimetro
La mujer que fue imputada por homicidio frustrado reiterado y maltrato habitual en contra de su hijastro de 13 años, fue agredida al interior del Centro Penitenciario de Alto Hospicio, donde permanecía en prisión preventiva. Producto de la golpiza, la interna sufrió lesiones de carácter grave y debió ser trasladada de urgencia al Hospital de Iquique, donde se mantiene bajo custodia. Según informó Emol, otras internas le habrían quebrado la nariz, en un ataque aparentemente motivado por la gravedad de los delitos por los cuales está siendo investigada. El caso ha generado conmoción a nivel nacional por la crudeza en las condiciones que la mujer mantenía al menor de edad. El caso salió a la luz la semana pasada, cuando vecinos de Iquique alertaron sobre la situación del niño, quien fue encontrado en condiciones deplorables. La mujer, que era su madrastra, lo mantenía durmiendo en el patio, lo alimentaba con sobras y le prohibía el acceso al baño. Yo pasaba frío. A veces me tiraba sin polerón, sin nada. No me dejaba entrar al baño. No me podía bañar, relató el menor en su testimonio ante la Fiscalía, según indicó la fiscal Camila Albarracín. A veces pasaba meses sin bañarme. En una oportunidad estuve seis días sin comer y tres sin tomar agua, consignó CHV Noticias. El niño también denunció haber sido golpeado con objetos contundentes y víctima de constantes agresiones verbales: Luego empezó a pegarme. Al principio era con chancletas, pero después fue hasta con palos. Me decía que era tonto, inútil, que me odiaba, que nadie me quería y que no tenía mamá. Actualmente, el Tribunal de Familia de Iquique evalúa la custodia del menor, ya que se supo que su padre habría abandonado el hogar tras una denuncia previa por violencia intrafamiliar presentada por la imputada. Fuente: Publimetro
Cuatro prendas componen el nuevo uniforme que utilizarán desde mayo los 36 reos más peligrosos del sistema penitenciario chileno, que actualmente se encuentran en el Recinto Especial Penitenciario de Alta Seguridad (Repas), anteriormente conocido como la ex Cárcel de Alta Seguridad de Santiago. Así lo informa La Tercera . Esta medida busca implementar un control más efectivo sobre la población penal y fue analizada por las autoridades de gobierno desde principios de año, tomando impulso en el ministerio de Justicia, liderado por Jaime Gajardo. El cronograma establecido por el gobierno indica que la implementación del uniforme comenzará en mayo, tras la adquisición de un primer lote de prendas a través de una compra reservada. Este anuncio ha sido recibido dentro de Gendarmería como una “revolución” en el manejo de la seguridad en las cárceles. Los internos que se encuentran en máxima seguridad vestirán un pantalón azul y una camiseta de manga larga color naranjo. Además, recibirán un polerón y una parka de los mismos colores. Las prendas han sido diseñadas con un material específico: tela ignífuga, lo que significa que son resistentes al fuego y a altas temperaturas. Este tipo de material protege a los reos de posibles quemaduras, ya que no son inflamables. Sin embargo, el ministerio de Justicia no ha revelado el costo de estos uniformes ni la cantidad que se comprará, argumentando que la seguridad de la población penal exige mantener esa información en reserva. El objetivo es evaluar su efectividad en el Repas antes de extender su uso a otros módulos de máxima seguridad en los distintos penales del país. Gajardo enfatizó que la implementación del uniforme es una estrategia observada en modelos penitenciarios internacionales, contribuyendo así al mantenimiento del orden interno en las cárceles. El ministro recalcó: “Estamos implementando una serie acciones para fortalecer el control...” Además, destacó: “Como lo hemos señalado...”, enfatizando su compromiso contra el crimen organizado. La implementación del nuevo uniforme también incluye un trabajo interno con los recluso... Fuente: Publimetro
La región de Magallanes se ve nuevamente sacudida por un escándalo que involucra a funcionarios de Gendarmería. En esta ocasión, cuatro empleados de la cárcel de Punta Arenas han sido denunciados por presuntas prácticas indebidas, como el abuso de poder para vender completos a los internos a un precio inflado de $3.500, dos mil pesos más caros que al público en general. El diputado Roberto Arroyo, representante del Biobío y miembro de la Comisión de Defensa, ha calificado este suceso como grave. Según sus palabras, estas prácticas no solo reflejan abuso de poder desde una posición privilegiada, sino también un aprovechamiento económico inaceptable que erosiona la confianza en la institución. Este incidente se suma a la preocupante cifra de ocho funcionarios de Gendarmería despedidos en lo que va del año por irregularidades administrativas. Arroyo ha expresado su inquietud al respecto: Aquí hay un problema de fondo. Estamos viendo una serie de hechos que evidencian falta de control interno, falta de liderazgo y ausencia de una estrategia clara para enfrentar estas conductas dentro de Gendarmería. Ante esta situación, el diputado Arroyo ha anunciado que solicitará una audiencia con la Dirección Nacional de Gendarmería y ha enviado un oficio al Ministerio de Justicia para obtener información sobre las causas identificadas y las acciones tomadas para abordar estos problemas. Además, se está evaluando la posibilidad de presentar un proyecto de ley destinado a fortalecer y modernizar a Gendarmería, proporcionándole herramientas adicionales, controles más estrictos y estándares más elevados para combatir el crimen organizado y prevenir la repetición de estos incidentes. En última instancia, Arroyo ha enfatizado la importancia de proteger la institucionalidad penitenciaria y garantizar que los reclusos cumplan sus condenas en un entorno libre de abusos o beneficios indebidos. El Estado debe dar ejemplo y mantener una política de tolerancia cero ante estos actos, concluyó el legislador. Fuente: Publimetro
En una audiencia judicial que tuvo lugar recientemente, se decretó la prisión preventiva de Martín de los Santos Lehmann , acusado de agredir brutalmente a un conserje en Vitacura. La jueza del 4° Juzgado de Garantía de Santiago accedió a la solicitud de la parte querellante y revocó la medida cautelar de firma mensual que hasta ahora mantenía el imputado. PUBLICIDAD Fue a mediados de mayo que De los Santos, de 34 años, atacó violentamente a Guillermo Oyarzún, trabajador de 70 años, causándole lesiones tan graves que perdió la visión de un ojo. La brutal golpiza generó conmoción pública y fue ampliamente difundida por redes sociales. En el transcurso de la audiencia realizada por Zoom, el acusado apareció tomando mate, vapeando y haciendo gestos a la cámara, lo que ya había generado críticas. Sin embargo, el momento más tenso ocurrió cuando la jueza comunicaba su decisión de enviarlo a la cárcel: el imputado interrumpió abruptamente y lanzó una serie de comentarios que sorprendieron a los presentes. “¡Oiga magistrado, usted está haciendo un show mediático! ¡Todo lo que ha dicho es falso, esto es completamente ilegal, no es un Estado de derecho!”, reclamó con evidente molestia. Luego añadió: “Le pido que tome una decisión según el código penal (...) Parece una audiencia que está manipulada por los medios de comunicación”, según consignó el video recogido por T13. Su intervención continuó con declaraciones que apuntaban a justificar su comportamiento: “Yo, como ciudadano libre, no condenado... Le duela a quien le duela, yo doy empleo, doy trabajo, soy una persona trabajadora, no ando eligiendo viejitos por la calle... si me tomo esta licencia es porque tengo mi derecho a defenderme“. Pero el alegato del imputado no quedó allí. Enseguida continuó con sus declaraciones y advertencias: “¡Va a haber un estallido social si esto no se soluciona como corresponde! ¡Le pido por favor que dé nuevamente su veredicto! (...) ¡No puede ser que las redes sociales sean más juez de garantía que usted! ¡¿Me entiende o no?! ¡Póngase en la posición de que yo sea su hijo!“. Pese a su arremetida, el tribunal ratificó la medida cautelar y ordenó el ingreso inmediato de De los Santos a prisión preventiva. Fuente: Publimetro
Un suboficial de Gendarmería fue detenido este lunes tras ser sorprendido intentando ingresar objetos prohibidos al Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) Colina I, en el marco de una operación conjunta entre la Fiscalía Metropolitana Occidente y el Departamento de Investigación Criminal de Gendarmería. El hecho ocurrió a las 7:45 horas, momento en que el funcionario se aprestaba a comenzar su turno. Según detalló la institución, el hombre portaba en su mochila 24 teléfonos celulares, 12,9 gramos de clorhidrato de cocaína, 40 gramos de cannabis, diversos medicamentos, $1.900.000 en efectivo y otros elementos aún bajo peritaje. Al ser abordado por sus colegas, el suboficial intentó huir en su vehículo particular. No obstante, al verse acorralado, abandonó el auto e intentó escapar a pie, incluso saltando el cerco perimetral del recinto. Su fuga fue frustrada por efectivos del equipo de Investigación Criminal de Gendarmería, quienes lograron detenerlo tras una breve persecución. La audiencia de control de detención se realizará este martes a las 11:00 horas en el Juzgado de Garantía de San Bernardo. El imputado será formalizado por tráfico de drogas en pequeñas cantidades y por el ingreso ilegal de dispositivos tecnológicos a un recinto penitenciario. Desde Gendarmería aseguraron que se aplicarán todas las sanciones administrativas correspondientes y enfatizaron su postura institucional frente a este tipo de hechos. “Reiteramos el compromiso institucional con erradicar cualquier forma de corrupción o ilícito dentro del sistema penitenciario ”, señalaron desde la entidad, según consignó ADN Chile. La investigación continúa con el objetivo de determinar si el funcionario actuaba solo o formaba parte de una red más amplia dedicada al ingreso a artículos ilícitos al penal. Fuente: Publimetro
La mujer que fue imputada por homicidio frustrado reiterado y maltrato habitual en contra de su hijastro de 13 años, fue agredida al interior del Centro Penitenciario de Alto Hospicio, donde permanecía en prisión preventiva. Producto de la golpiza, la interna sufrió lesiones de carácter grave y debió ser trasladada de urgencia al Hospital de Iquique, donde se mantiene bajo custodia. Según informó Emol, otras internas le habrían quebrado la nariz, en un ataque aparentemente motivado por la gravedad de los delitos por los cuales está siendo investigada. El caso ha generado conmoción a nivel nacional por la crudeza en las condiciones que la mujer mantenía al menor de edad. El caso salió a la luz la semana pasada, cuando vecinos de Iquique alertaron sobre la situación del niño, quien fue encontrado en condiciones deplorables. La mujer, que era su madrastra, lo mantenía durmiendo en el patio, lo alimentaba con sobras y le prohibía el acceso al baño. Yo pasaba frío. A veces me tiraba sin polerón, sin nada. No me dejaba entrar al baño. No me podía bañar, relató el menor en su testimonio ante la Fiscalía, según indicó la fiscal Camila Albarracín. A veces pasaba meses sin bañarme. En una oportunidad estuve seis días sin comer y tres sin tomar agua, consignó CHV Noticias. El niño también denunció haber sido golpeado con objetos contundentes y víctima de constantes agresiones verbales: Luego empezó a pegarme. Al principio era con chancletas, pero después fue hasta con palos. Me decía que era tonto, inútil, que me odiaba, que nadie me quería y que no tenía mamá. Actualmente, el Tribunal de Familia de Iquique evalúa la custodia del menor, ya que se supo que su padre habría abandonado el hogar tras una denuncia previa por violencia intrafamiliar presentada por la imputada. Fuente: Publimetro
Cuatro prendas componen el nuevo uniforme que utilizarán desde mayo los 36 reos más peligrosos del sistema penitenciario chileno, que actualmente se encuentran en el Recinto Especial Penitenciario de Alta Seguridad (Repas), anteriormente conocido como la ex Cárcel de Alta Seguridad de Santiago. Así lo informa La Tercera . Esta medida busca implementar un control más efectivo sobre la población penal y fue analizada por las autoridades de gobierno desde principios de año, tomando impulso en el ministerio de Justicia, liderado por Jaime Gajardo. El cronograma establecido por el gobierno indica que la implementación del uniforme comenzará en mayo, tras la adquisición de un primer lote de prendas a través de una compra reservada. Este anuncio ha sido recibido dentro de Gendarmería como una “revolución” en el manejo de la seguridad en las cárceles. Los internos que se encuentran en máxima seguridad vestirán un pantalón azul y una camiseta de manga larga color naranjo. Además, recibirán un polerón y una parka de los mismos colores. Las prendas han sido diseñadas con un material específico: tela ignífuga, lo que significa que son resistentes al fuego y a altas temperaturas. Este tipo de material protege a los reos de posibles quemaduras, ya que no son inflamables. Sin embargo, el ministerio de Justicia no ha revelado el costo de estos uniformes ni la cantidad que se comprará, argumentando que la seguridad de la población penal exige mantener esa información en reserva. El objetivo es evaluar su efectividad en el Repas antes de extender su uso a otros módulos de máxima seguridad en los distintos penales del país. Gajardo enfatizó que la implementación del uniforme es una estrategia observada en modelos penitenciarios internacionales, contribuyendo así al mantenimiento del orden interno en las cárceles. El ministro recalcó: “Estamos implementando una serie acciones para fortalecer el control...” Además, destacó: “Como lo hemos señalado...”, enfatizando su compromiso contra el crimen organizado. La implementación del nuevo uniforme también incluye un trabajo interno con los recluso... Fuente: Publimetro