Un preocupante registro se conoció esta semana en Chile respecto de procedimientos judiciales relacionados a causas penales por delitos de fraude , los cuales este primer trimestre alcanzaron un incremento de un 56,3% respecto del año pasado, el mayor que se haya informado en la última década en el país. Estos primeros meses del año, más de 10 mil causas judiciales por este tipo de delitos se llevaron a tribunales, siendo las regiones Metropolitana y la del Maule las más afectadas respecto de los 6.818 casos judicializados el año pasado. Fueron 10.655 los casos que conocieron los tribunales respecto de delitos vinculados a fraudes estos primeros tres meses, una cifra entregada por la consultora experta Sheriff (plataforma tecnológica de evaluación y monitoreo de personas para crear perfiles de riesgo crediticio), que resume en tres al mayor grupo de ilícitos: estafas (9.0317 causas penales), uso malicioso de tarjetas y dispositivos (873), y celebración de contrato simulado (68). Este es el mayor número de fraudes penales reportados en un primer trimestre desde que hay registros sistematizados, es decir, desde 2013. “Estamos viendo un fenómeno preocupante: el crecimiento sostenido de la judicialización por fraude, especialmente en zonas donde antes era menos habitual. Esto nos habla de un mayor uso del sistema judicial para perseguir delitos financieros, pero también de una mayor incidencia de estafas y engaños”, explica Vicente Cruz, CEO de Sheriff. “Es importante mencionar que esta data no incluye las causas de fraude reportadas en los respectivos Juzgados de Policía Local ”, aclara Cruz, dejando en evidencia el preocupante aumento de estos delitos en el país. La sofisticación d e los métodos d e fraude digital sigue creciendo. L a velocidad d el dleito supera muchas veces la capacidad d e reacción d e las víctimas y los organismos por detrás, p or eso es clave tener a mano fuentes d einformacióny herramientasp redictivas, dice Cruz, La prevención es la mejor estrategia. s ar tecnología para anticiparse f rudesno es una opción, s una necesidaden este nuevo escenario, concluyeel líderd e Sheriff. Fuente: Publimetro
El teléfono celular se ha convertido en un imprescindible en estos tiempos de modernidad; para algunos es la principal herramienta de trabajo, también para facilitar parte de la jornada diaria. Sin embargo también es una herramienta de riesgo de estafas cada vez más comunes. De acuerdo con la Policía de Investigaciones de Chile , PDI las denuncias de este tipo de casos siguen en aumento. En 2024 se registraron al menos 4.533 acusaciones, poco más de 700 casos más con respecto al año anterior cuando se recibieron unas 3.800 denuncias. Si bien las estafas telefónicas no son una novedad, estas se han ido modificando a medida que los delincuentes consiguen nuevas técnicas con la ayuda de la tecnología y algo de su astucia. En el programa “Contigo en Directo”, detallaron una modalidad que está haciéndose cada más recurrente en estos días: las “robollamadas”. En este tipo de estafas se suele recibir una llamada que aparenta ser inofensiva : llaman, alguien contesta, del otro lado nadie habla. La persona puede hablar o finalmente cortar, pero la sola acción de contestar el teléfono ya da data a los delincuentes de ese número de teléfono. “Es una alarma para que estas bandas sepan que en ese número de teléfono puede atender una persona a quien engañar ya sea solicitando información, pidiendo claves o ese tipo de estafas, esa sola llamada debe ser una situación monitoreada y tener en cuenta que ya podría estar dentro del radar de estos delincuentes”, advirtieron en el reporte de Chilevisión. Entre las reacciones varios se identificaron con esta irregularidad y algunos revelaron su estrategia para prevenir. “Truecaller y bloqueo es lo más seguro”, “Tengo como 300 números bloqueados”, “He bloqueado tantos números que ya estoy cansada aún pagando por un número privado llaman igual”. Fuente: Publimetro
Un preocupante registro se conoció esta semana en Chile respecto de procedimientos judiciales relacionados a causas penales por delitos de fraude , los cuales este primer trimestre alcanzaron un incremento de un 56,3% respecto del año pasado, el mayor que se haya informado en la última década en el país. Estos primeros meses del año, más de 10 mil causas judiciales por este tipo de delitos se llevaron a tribunales, siendo las regiones Metropolitana y la del Maule las más afectadas respecto de los 6.818 casos judicializados el año pasado. Fueron 10.655 los casos que conocieron los tribunales respecto de delitos vinculados a fraudes estos primeros tres meses, una cifra entregada por la consultora experta Sheriff (plataforma tecnológica de evaluación y monitoreo de personas para crear perfiles de riesgo crediticio), que resume en tres al mayor grupo de ilícitos: estafas (9.0317 causas penales), uso malicioso de tarjetas y dispositivos (873), y celebración de contrato simulado (68). Este es el mayor número de fraudes penales reportados en un primer trimestre desde que hay registros sistematizados, es decir, desde 2013. “Estamos viendo un fenómeno preocupante: el crecimiento sostenido de la judicialización por fraude, especialmente en zonas donde antes era menos habitual. Esto nos habla de un mayor uso del sistema judicial para perseguir delitos financieros, pero también de una mayor incidencia de estafas y engaños”, explica Vicente Cruz, CEO de Sheriff. “Es importante mencionar que esta data no incluye las causas de fraude reportadas en los respectivos Juzgados de Policía Local ”, aclara Cruz, dejando en evidencia el preocupante aumento de estos delitos en el país. La sofisticación d e los métodos d e fraude digital sigue creciendo. L a velocidad d el dleito supera muchas veces la capacidad d e reacción d e las víctimas y los organismos por detrás, p or eso es clave tener a mano fuentes d einformacióny herramientasp redictivas, dice Cruz, La prevención es la mejor estrategia. s ar tecnología para anticiparse f rudesno es una opción, s una necesidaden este nuevo escenario, concluyeel líderd e Sheriff. Fuente: Publimetro
El teléfono celular se ha convertido en un imprescindible en estos tiempos de modernidad; para algunos es la principal herramienta de trabajo, también para facilitar parte de la jornada diaria. Sin embargo también es una herramienta de riesgo de estafas cada vez más comunes. De acuerdo con la Policía de Investigaciones de Chile , PDI las denuncias de este tipo de casos siguen en aumento. En 2024 se registraron al menos 4.533 acusaciones, poco más de 700 casos más con respecto al año anterior cuando se recibieron unas 3.800 denuncias. Si bien las estafas telefónicas no son una novedad, estas se han ido modificando a medida que los delincuentes consiguen nuevas técnicas con la ayuda de la tecnología y algo de su astucia. En el programa “Contigo en Directo”, detallaron una modalidad que está haciéndose cada más recurrente en estos días: las “robollamadas”. En este tipo de estafas se suele recibir una llamada que aparenta ser inofensiva : llaman, alguien contesta, del otro lado nadie habla. La persona puede hablar o finalmente cortar, pero la sola acción de contestar el teléfono ya da data a los delincuentes de ese número de teléfono. “Es una alarma para que estas bandas sepan que en ese número de teléfono puede atender una persona a quien engañar ya sea solicitando información, pidiendo claves o ese tipo de estafas, esa sola llamada debe ser una situación monitoreada y tener en cuenta que ya podría estar dentro del radar de estos delincuentes”, advirtieron en el reporte de Chilevisión. Entre las reacciones varios se identificaron con esta irregularidad y algunos revelaron su estrategia para prevenir. “Truecaller y bloqueo es lo más seguro”, “Tengo como 300 números bloqueados”, “He bloqueado tantos números que ya estoy cansada aún pagando por un número privado llaman igual”. Fuente: Publimetro