Un incidente grave sacudió a Brasil cuando un niño de 4 años fue agredido por un apoderado durante un festival escolar en el Distrito Federal. El agresor, identificado como Douglas Filipe Parisio Lima, subió al escenario y empujó al menor, tomándolo del cuello, en un acto que se volvió viral en las redes sociales.

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Según las declaraciones de Lima, justificó su acción alegando que el niño agredido había estado haciendo bullying a su hijo. La defensa de Lima afirmó que el pequeño había sido víctima de constantes episodios de bullying y agresiones físicas por parte de su compañero. La abogada Marleide Anatolia Pereira da Silva expresó que el apoderado se encuentra "profundamente arrepentido, entristecido y avergonzado", pero destacó que la situación refleja la desesperación de un padre al ver a su hijo ser atacado y humillado durante meses.

El colegio emitió un comunicado condenando la agresión y mostrando preocupación por los hechos. Señalaron: "Es inaceptable y repugnante que, después de un acto tan grave, un adulto intente justificar una agresión física contra un niño". Además, reafirmaron que este tipo de comportamientos "nunca serán tolerados" en su institución.

Este caso ha puesto de relieve el problema del bullying en las instituciones educativas. El fenómeno se ha convertido en un tema crucial en la discusión sobre el bienestar infantil, ya que aproximadamente 1 de cada 3 niños en edad escolar ha sido víctima de bullying en algún momento.