La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Estaca Copiapó, en coordinación con CONAF, MOP, Carrera de Servicio Social y de Educación Física de la UDA, la Municipalidad de Copiapó, Club de Rotarios Copiapó y Club de Rotarios Copiapó Oriente, han llevado a cabo la primera plantación del año 2025 al sembrar 100 árboles en la salida sur de la ciudad de Copiapó. Esta iniciativa sigue a la plantación inicial de 15 árboles en 2024, los cuales fueron regados por miembros de la Iglesia.

La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días reafirma su compromiso con el cuidado del medio ambiente al participar activamente en acciones como esta. Según declaraciones de la institución, "el bienestar individual y comunitario está estrechamente vinculado a un entorno natural saludable", por lo que la sostenibilidad ambiental es una parte fundamental de su misión. Además, se destaca que "el cuidado de la tierra es una responsabilidad sagrada confiada a los hijos de Dios".

El obispo presidente de la Iglesia, Gérald Caussé, ha enumerado seis prioridades relacionadas con la sostenibilidad ambiental. Estas incluyen el aumento en la eficiencia energética y el uso de recursos renovables, la conservación del agua, la reducción del desperdicio de materiales, la mejora en la calidad del aire, prácticas sostenibles en agricultura y ganadería, así como el fomento del diseño y construcción sostenibles.

En palabras del Profeta José Smith, "tenemos la solemne responsabilidad de cuidar esta creación divina". La Iglesia considera que tanto la tierra como todo lo que hay en ella son creaciones divinas y parte del plan para la redención humana. Por lo tanto, se enfatiza que todos somos mayordomos y no propietarios de la tierra, y se insta a utilizar con gratitud los recursos proporcionados por Dios para cuidar tanto a los necesitados como al medio ambiente.

En cuanto a las plantaciones realizadas en octubre del año 2024 y durante este año 2025, se destaca que estas acciones tienen un impacto significativo. Los árboles no solo producen oxígeno y purifican el aire, sino que también contribuyen a mantener suelos fértiles, evitar erosión, conservar agua y servir como refugios para la fauna local.

Plantar un árbol se considera una inversión hacia un futuro sostenible. Además, se destaca que los árboles evocan sensaciones únicas para las personas urbanas y desempeñan un papel crucial en el equilibrio ecológico. En este sentido, se menciona que "los árboles son fundamentales para la vida en nuestro planeta" al desempeñar roles clave en la regulación climática y conservación de biodiversidad.

En resumen, las acciones llevadas a cabo por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días reflejan su compromiso con el cuidado del medio ambiente y el fomento de prácticas sostenibles para garantizar un futuro próspero para las generaciones venideras.