La mañana del 18 de septiembre, la Catedral de Copiapó fue testigo de la celebración del Te Deum de Fiestas Patrias, contando con la presencia de autoridades comunales, regionales, parlamentarios y representantes de los poderes del Estado. El obispo de Copiapó, don Ricardo Morales, presidió la ceremonia y aprovechó la oportunidad para enviar un fuerte mensaje de reflexión y compromiso.

Los vulnerables y necesitados

El obispo destacó la importancia de reconocer y proteger a los más vulnerables de la sociedad, especialmente en la región de Atacama. Se refirió a las tomas y campamentos donde las personas viven sin acceso a servicios básicos como agua potable y alcantarillado, y donde la violencia y la drogadicción son una realidad constante. También mencionó el reciente accidente de pescadores de Caldera, donde algunos jóvenes no tenían contrato de trabajo ni registro para navegar.

El obispo también abordó temas como el aborto y la corrupción. En cuanto al aborto, enfatizó que el ser humano en el vientre materno es vulnerable y merece protección. Sobre la corrupción, llamó a renovar el compromiso por hacer de Chile un país más justo y equitativo, donde el derecho no sea retórica vacía.

Educación y opción por los niños y jóvenes

También destacó la importancia de la educación como espacio para crecer en valores y respeto. Enumeró cifras que muestran la región con el promedio más bajo en el Simce de matemáticas y lectura, y altos niveles de ausentismo escolar. Pidió que el gobierno central se comprometa con la región y que se priorice la educación de los niños y jóvenes.

Finalmente, el obispo expresó su esperanza en que los electos no se olviden de quienes confiaron en ellos y trabajen por el bien común. Compartió las «bienaventuranzas del político» propuestas por un Cardenal vietnamita y citadas por el Papa Francisco, destacando la importancia de la credibilidad, la coherencia y el compromiso con la democracia.

La celebración culminó con el Himno Nacional y la banda del Regimiento, y fue animada por el coro de la parroquia Sagrado Corazón y el conjunto folclórico Espuelas del Desierto.